Adoptar es abrirle la puerta a un nuevo miembro de la familia, lleno de amor y momentos especiales por venir. Sin embargo, para que esta transición sea tan armoniosa como sea posible, es fundamental preparar tu hogar.
Está la creencia de que las mascotas adoptadas tienen dificultades para adaptarse a nuevos hogares o que solo los espacios grandes son aptos para ellas. La verdad es que, con el enfoque y cuidado adecuado, cualquier hogar puede convertirse en el lugar perfecto para una mascota adoptada, sin importar su tamaño.
¿Cómo hacer de tu hogar un hogar para ellos?
1. Seguridad ante todo:
Antes de la llegada de tu mascota, recorre tu hogar y asegura los cables sueltos, guarda los productos de limpieza y medicamentos en armarios, y planta en tu jardín especies no tóxicas para animales.
2. Visita al Veterinario:
Una de las primeras adaptaciones no es física, sino médica. Programa una visita al veterinario para un chequeo general, vacunas si son necesarias, y para hablar sobre la mejor dieta y cuidados preventivos para tu nueva mascota.
3. Un espacio propio:
Designa un área especial para tu mascota, donde pueda sentirse segura y cómoda. Este lugar puede tener su cama, juguetes y platos para comida y agua. Este espacio le brinda un sentido de pertenencia y seguridad.
4. La importancia de la rutina:
Establecer una rutina diaria de alimentación, paseos y tiempo de juego ayuda a tu mascota a sentirse segura y a adaptarse más rápidamente a su nuevo hogar. Esto ayuda a reducir el estrés y fomentar un ambiente de tranquilidad.
5. Zona de Necesidades
Establecer una rutina clara y un lugar específico para que los perros realicen sus necesidades es fundamental. En Educando, ofrecemos programas especializados en el adiestramiento para el control de esfínteres, diseñados para enseñar a tu perro dónde y cuándo es apropiado hacer sus necesidades. Este entrenamiento no solo facilita la convivencia en casa, sino que también contribuye al bienestar y la disciplina de tu mascota.
Pregunta por el entrenamiento.
6. Paciencia y amor:
La adaptación es un proceso, y cada perrito lleva su propio ritmo. Algunos pueden tardar hasta tres meses en adaptarse a su nuevo hogar. Por lo mismo, es importante brindarles amor, paciencia y comprensión durante este periodo, pero ojo, sin sobre consentirlo, ni sobreprotegerlo ya que podría derivar en ansiedad por separación.
Adaptar tu hogar para una mascota adoptada es más que hacer cambios físicos; es prepararte para abrir tu corazón y tu vida a un nuevo ser. Recuerda, al adoptar, no solo estás dando un hogar a una mascota necesitada, sino que también estás ganando un amigo fiel que llenará tu vida de alegría e incontables momentos felices.
Amamos a tu perrito como si fuera nuestro.